L
a primera mitad del año
21 fue muy agitada.
En el plano institucional
sanjuanino, se libró una verdade-
ra batalla en todos los campos.
Ya las formas habían quedado de
lado.
Eran dos enemigos dispuestos a
jugar todas sus cartas para ani-
quilar al adversario.
Amable Jones estaba dispuesto a
avanzar sobre todos los obstácu-
los que se interponían en su ges-
tión.
Aunque para eso debiera pasar
por encima de las instituciones o
hacer caprichosas interpretacio-
nes de la Constitución y las
leyes.
La oposición, por su parte, arre-
metía ciega contra el mandata-
rio, cerrándole todos los cami-
nos.
La justicia, la Legislatura, el
Parlamento nacional, la
prensa y hasta las amenazas
se transforman así en mone-
da corriente.
El gobernador cada día queda
más sólo en San Juan y debe
convocar a gente de otras partes,
lo que aumentan la descon-
fianza y resistencia del medio.
Aunque el debate pasa por las
formalidades legales, nadie duda
que la pulseada es política y que
no sólo se juega en la provincia.
Allá, en Buenos Aires, está el
único sostén realmente firme de
Jones:
el presidente de la
Nación, Hipólito Yrigoyen.
Solo el
apoyo del
presidente
le iba
quedando
a Jones
Suplementos coleccionables
5
Juan Carlos Bataller
Hipolito Yrigoyen
y Amable Jones
Caricatura de Miguel Camporro
JONES
