revoluciones_y_crimenes_politicos_en_sanjuan - page 186-187

Los autos ya estaban en marcha cuando subió Cantoni. En momentos en que los coches partían
sonó el primer disparo. Enseguida el coche de Cantoni fue acribillado a balazos. Pero continuaron
algunos metros.
A mitad de cuadra, entre Rivadavia y Laprida, Tourres hizo detener la marcha y revólver en mano
bajó a la calzada. Inmediatamente fue alcanzado por numerosos disparos que le acribillaron el cuerpo.
A todo esto, García Córdova sacó a Cantoni –que estaba herido en la cabeza y en la cadera— y lo
introdujo en la casa del doctor Rodríguez Riveros, que por casualidad estaba abierta.
Aldo que permanecía en la Casa de Gobierno hizo cerrar las puertas y ordenó repeler la agresión.
En un primer momento pensó que se trataba de un atentado contra el gobernador. Era mucho más: se
trataba de un alzamiento revolucionario.
El tiroteo se había generalizado en las cuatro esquinas de la plaza y distintos puntos de la ciudad.
Los revolucionarios dominaban la situación y los cantonistas defendían posiciones en distintos edificios.
No era una lucha cualquiera. Desde la Casa de Gobierno sonaba el golpetear de una ametrallado-
ra mientras el tiroteo era infernal y hasta se arrojaban bombas.
Pronto el terror se adueñó de los sanjuaninos que desesperaban por la suerte de familiares a los
que alcanzó la revolución camino a sus casas.
Aldo Cantoni intentó comunicarse con el Regimiento de Marquezado y con el gobierno nacional.
El ministro de Gobierno, Adelmo Faelli, se acercó a Aldo:
—Tenga cuidado con lo que dice, doctor
.
—¿Qué pasa?
—Me han informado que los teléfonos están intervenidos.
—¿Cómo carajo puede ser?
—Los gansos controlan la Telefónica
.
—¿Sabe quién trabaja allí?
—No
Estas preocupaciones cruzaban por la cabeza de Federico.
Hacía menos de un mes, Porto, Luis
María Mulleady, Domingo Vignoli y Juan Luis Castro habían pedido la reorganización del partido, que
estaba presidido por Aldo. No fueron escuchados. Comenzaron a distanciarse del bloque legislativo.
La ruptura definitiva se produjo cuando Porto amparó a un preso que se había evadido de la cár-
cel. Cantoni ordenó a la policía que le allanara la casa y se produjo un tiroteo.
Ya no había regreso. El 27 de enero expulsó a Porto y Mulleady. Estos y Vignoli, que renunció,
habían formado la Junta Reorganizadora de la Unión Cívica Radical Bloquista y se disponían a dar bata-
lla contra Federico en las elecciones para diputados nacionales que se realizarían al mes siguiente, el 11
de marzo.
—Estos hijos de puta seguro que se han unido a los gansos—
, pensaba Cantoni
Los revolucionarios habían instalado francotiradores en varios puntos: el Club Social, sobre calle
Rivadavia, el edificio
Del Bono, en Rivadavia y
Mendoza, el Banco Italo
Argentino, el Banco
Comercial, la casa de Diego Young, sobre calle Mitre, el Colegio Nacional, la casa de Mario Atienza, el
cine Cervantes, la casa Zunino, en Mitre y Mendoza, un sanatorio que pertenecía a López Mansilla y la
casa de Luis Castro.
Todos los francotiradores apuntaban a la Casa de Gobierno.
En la esquina de la farmacia Chiarulli (hoy farmacia Plana, en Rivadavia y General Acha), un
hombre debía pasarse el pañuelo por la nuca. Esa sería la señal de que Cantoni salía de la Casa de
Gobierno.
Pero el encargado de la tarea no fue a la cita.
Revoluciones y crímenes políticos en San Juan
Juan Carlos Bataller
184
185
A cargo del Dr. Rogelio Driollet y Horacio Esbry
estuvo la tarea de tomar la sede de la Central
Telefónica, con el objeto de cortar las
comunicaciones del gobierno. Tomada la central,
las autoridades policiales y del gobierno no
pudieron comunicarse el resto del día.
Al mando del Ing. Santiago Graffigna, la sede de la
Comisaría 1ra. fue tomada por los revolucionarios
luego de una breve lucha de sus defensores. Esta esta-
ba ubicada cerca de la casa de Graffigna, en donde un
fuego nutrido logro reducir a las fuerzas policiales
La junta revolucionaria que tuvo a su cargo la dirección del movimiento. La integraban hombres de
distintos partidos políticos. La foto fue tomada en el local del Distrito Militar, donde se constituyeron
detenidos a requerimiento de las autoridades militares
1...,166-167,168-169,170-171,172-173,174-175,176-177,178-179,180-181,182-183,184-185 188-189,190-191,192-193,194
Powered by FlippingBook