V
oy a confesarles un defecto: soy un exagerado para hablar de
San Juan cuando estoy fuera de la provincia.
Y, lógicamente, los amigos se embalan.
Es así como a causa de mi desmesurada pintura de lo que es San Juan,
en más de una oportunidad me he encontrado con una llamada telefó-
nica o un e-mail que decía:
-Tanto has hablado de San Juan que estamos decididos a pasar las vaca-
111 - A
San Juan
2035
Cuando un amigo viene
19