Citas sanjuaninas
Viernes 19 de agosto de 2016
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“Sanjuanismos. De perifrá-
sicos, saurópodos y viejos
embusteros”
está estructu-
rado como una novela, en la
que un guía de turismo san-
juanino les hace conocer a
varios turistas, de Argentina
y extranjeros, los lugares
más importantes de la pro-
vincia. Durante el viaje el
guía les irá presentando a
los turistas diferentes perso-
najes tradicionales de San
Juan, escritores y lugareños,
y las charlas irán reflejando
los modismos de cada uno.
“A fin de agilizar la lectura y
hacerla suave para el lector,
omitiré utilizar comillas
dando a entender a cada
momento, que hay conjuga-
ciones verbales, anteposi-
ción de artículos a nombres
propios o frases muy nues-
tras, que nada tienen que
ver con la Academia Argen-
tina de Letras y más distan-
ciado aún, de la Real
Academia Española”,
dice
Sergio Rubén Ruarte, el
autor, en el prólogo del libro.
Y agrega
“Destinaré ese re-
curso para resaltar a los ami-
gos turistas, dichos y
expresiones usuales de
nuestra provincia”
Aquí se reproducen algunos
de textos escogidos:
“Yo les aconsejaría tomar mates
acompañados de semitas con
chicharrones, a la sombra de un
sauce llorón, muy llorón. Degus-
tar un racimito de uvas nuevas,
lavadas en las frescas aguas del
surgente. Que se peguen una es-
capada hasta la Quebrada de la
Flecha y acampen toda la noche,
para encandilarse con las estre-
llas...Les presentaría a los tíos
gauchos del Médano de Oro y
Pocito, para que les consigan ca-
ballos y los inviten a una juntada
en la India Mariana, que prueben
ensaimadas y sobreasadas ma-
llorquinas elaboradas por las tías.
Recuerda, venimos de una familia
numerosa, tenemos parientes
como para tirar al techo... ”.
“Lo recibí, estaba comprando
carne blanda”….
“Níiiiiño, dijo el principiante
guía turístico”.
“Chichero, el que vendía chicha
en botellas de vidrio, las traía en
cajón de madera, atada a la parte
trasera de la bicicleta….”.
(Guía):
- ¿Usted es tapiero?
(Albardonero):
-Soy lajeño, pero
actualmente vivo en Campo Afuera,
he venido a visitar al único hermano
que me queda vivo, el mayor de los
Cataldos. ¿Van a recorrer todo Albar-
dón? Miren que es grande y cauti-
vante, cómo será de lindo, que hasta
las brujas se vienen a reunir para
estos lados”.
“La mula ánima o
Mulánima: quien
fue una mujer con-
vertida en mula,
por haber tenido re-
laciones sexuales con un sacer-
dote, cuentan que aparece en los
caminos, empieza relinchando y
termina llorando”.
“...El día que no tengo sol es como si
algo me faltara, en cambio me da un
poquito de bronca: “No vamos a
poder respirar hoy”, “¡Qué calor asfi-
xiantes que hace!”, “¡Nos vamos a
morir de calor”, ”¡Qué sofocante
está, es muuucho!”, “No es tanta la
calor, sino el vapor”, “Con la calor y
los mosquitos, no vamos a pegar un
ojo”, “Antes no hacía este calor”,
“Che, qué calor, dejá de joder, no
entra aire”, “¿Viste la calor que
hace?, “Esta calor no es de la
época” y póngale que también es
abrasador, bochornoso y achicharra-
dor y ya está”.
“...En el centro, por cuadra que
agarre, encuentra algún conocido,
tenemos una frase ilustradora,
“¡Qué chico es San Juan!...jamás
se llama o se visita a la siesta a
quien se aprecia”
“…salí tempranito y todavía no
vuelvo, después va a decir que soy
“pata e’ perro…”.
Cóndor Antara en el Valle de Huaco,
Jáchal, una de las fotos que ilustra el libro.