GOBERNADORES DEL SIGLO XIX EN SAN JUAN
Los próceres en carne viva
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Años más tarde, cuando ya Sarmiento había sido
Sarmiento, lo convencieron para que aceptara
postularse como candidato a legislador nacional.
Un oscuro policía de apellido Cabezas, le ganó la
elección. Ni siquiera su más prominente hijo había
podido ser profeta en San Juan.