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JONES
ban al interventor numerosas personas.
Al descender del coche y durante el trayecto
de la comitiva, no se oyó ninguna manifesta-
ción, habiéndose hecho por parte de la policía
una distribución de su personal, vigilando
atentamente, con objeto de impedir manifes-
taciones.
El ministro de Gobierno, Sr. Zavalla, se ade-
lantó al encuentro del señor Bello, acompa-
ñándolo a su entrada a la estación monseñor
Orzali, el comisario Sr. Santiago, el jefe de
las fuerzas nacionales, mayor Chavarría y
oficiales del Ejército, jefe del distrito militar,
teniente coronel Rubén Arévalo Cabeza; jefe
del distrito del Correos y Telégrafos, D.
Viviano Costa; jefe de Policía, D. Rosselot;
gerente del Banco de la Provincia, Sr. Colón
Godoy; jefes de las diversas reparticiones
públicas y empleados superiores de las mis-
mas.
En el trayecto por la calle Mitre, hasta su alo-
jamiento, numerosas personas presenciaron
desde sus casas el paso del interventor.
Al llegar al hotel Las Provincias, donde se
alojó el ingeniero Bello, recibió los saludos
de numerosas personas.
En la estación
de Mendoza
Mendoza, 19. —
D
e paso para San Juan, el interventor
nacional de esa provincia, D. Julio
Bello, fue saludado en la estación
por el interventor, señor Vargas Gómez, el
ministro de Gobierno y los secretarios priva-
dos del interventor.
En el mismo tren salió para la vecina provin-
cia el enviado especial de La Nación, D. Julio
Barbetti.
Entrevista
con el interventor
Mendoza, 19. —
D
urante el trayecto de Mendoza a San
Juan he tenido ocasión de hablar
esta mañana, en el tren, con el inter-
ventor federal, ingeniero Bello, quien se
manifestó sumamente reservado con respecto
a numerosos detalles, acerca de la situación
sanjuanina.
Me dio la impresión de que conoce a fondo la
situación en que le va a tocar actuar, manifes-
tándome que, en su propósito de sintetizar
bien su pensamiento, había escrito las decla-
raciones que me facilitó.
Me dijo, además, que la situación de San Juan
era delicada y que había que contemplarla
con gran serenidad de espíritu, para proceder
sin vacilaciones ni entorpecimientos, pero con
decisión y energía.
Agregó que creía que iba a salir airoso en la
misión que le confiara el Ejecutivo Nacional,
porque deseaba proceder con entero conoci-
miento de las cosas, estudiando bien los asun-
tos y al mismo tiempo con entera libertad.
Se refirió luego al personal que la acompaña-
ba, del que hizo grandes elogios, interesándo-
se por aclarar ciertos detalles, que conocía
por la crónica de los sucesos políticos, últi-
mamente desarrollados en esta provincia.
Declaraciones
del interventor
San Juan, 19. —
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l interventor nacional Sr. Bello ha
formulado las siguientes declaracio-
nes:
“Los términos del decreto del P.E. de la
Nación, determinan el concepto y el alcance
de la intervención. Las instrucciones con que
he salido de la capital las confirman. Se
deberá dar cumplimiento a la ley que manda
integrar la Cámara de Diputados y las
Municipalidades de San Juan, realizando los
correspondientes actos electorales de acuerdo
con las instituciones legales de la provincia.
“Desde luego resulta evidente la necesidad de
estudiar los antecedentes de toda naturaleza,
cuyo conocimiento se requiere para que la
intervención pueda dar al pueblo de San Juan
las garantías indispensables a fin de que la
provincia se provea de sus legítimas repre-
sentaciones públicas, en condiciones de liber-
tad y de tranquilidad dignas de la presencia
de la autoridad nacional que viene dispuesta a
desenvolver su acción en conformidad con
las orientaciones morales fijadas en las ins-
trucciones del Gobierno de la Nación.
“El esclarecimiento de tales antecedentes y el
ordenamiento de las bases legales de los
actos cívicos a realizarse, serán, pues, los
objetos inmediatos de las labores de la inter-
vención.
Procuraré obrar con la mayor diligencia en
esta investigación, para de este modo satisfa-
cer el anhelo público y del Gobierno de la
Nación, de que el pueblo de San Juan recobre
a la mayor brevedad posible, la normalidad
en el funcionamiento de sus instituciones
propias.
Los representantes de la prensa, los propulso-
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