comunicación, las actividades culturales,
etc.
Para lograr los resultados que hoy
publicamos hemos tenido en cuenta la
lectura e interpretación de documentos
guardados en nuestra provincia, como
también otros, por ejemplo, los archivos
de las empresas ferroviarias inglesas que
nos proporcionaron valiosos datos sobre
nuestro pasado. El análisis de la
bibliografía local completó el marco
documental.
Tuvimos en cuenta numerosos aportes
producto tanto de la tradición oral como
testimonios orales directos y vivenciales.
La utilización del completísimo archivo
fotográfico que posee "El Nuevo Diario"
(en parte ya publicado), nos permitió
enriquecer e ilustrar enormemente
nuestra labor. Máxime cuando se trata de
historiar un período tan rico en imágenes.
Muchas veces, por ejemplo, la foto de un acto en
una escuela nos brindó mucha más información
que el discurso del directivo de la misma. La
lectura de los numerosos diarios locales
publicados en ese lapso ayudó a completar el
proyecto. Por último, cabe destacar que hemos
empleado, a veces a riesgo de cansar al lector,
las fuentes estadísticas o cuantitativas que
proporcionaron los diferentes censos de carácter
provincial o nacional realizados en nuestro medio.
Y quizás lo más importante: hemos tratado, sin
descuidar el aspecto documental, de lograr la
mejor difusión del trabajo. Llegar a un público en
general y no sólo al especialista. Para ello hemos
intentado utilizar un lenguaje claro y ameno
donde se evidencien los contrastes y situaciones
que despiertan el interés del lector.
Consecuente con esta idea y en el marco de
nuestras posibilidades hemos recreado
situaciones y dado la palabra a los protagonistas
a fin de agilizar y enriquecer el conjunto.