Juan Carlos Bataller
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Anécdotas de la política sanjuanina
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las patas de la mula
U
no de los ministros más pintorescos que tuvo Ruiz
Aguilar fue el ingeniero Perelló,
ministro de Obras
Públicas.
Un día estaban en reunión de gabinete y una manifestación de
choferes de ómnibus llegó a la Casa de Gobierno.
—Perelló, ahí están tus amigos. Vas a tener que atender-
los...
—¿Y porqué yo gobernador?
—¿Y qué querés, que lo atienda el gobernador, para que lo
puteen?
—Claro, claro, a mi siempre me tiran a las patas de las mulas-,
contestó Perelló ante las risas generalizadas.
(Contado por Reynaldo Botella)
la azucarera
L
a forma de ser de Jorge Ruiz Aguilar le permitió hacer
buenas relaciones en Buenos Aires.
Uno de los amigos que hizo durante su gestión fue Fernando
Alfonsín, hermano del presidente y encargado del Plan
Alimentario Nacional.
Cada vez que viajaba a la Capital Federal, Ruiz Aguilar se
daba una vueltita por la oficina de Fernando.
La primera vez que lo visitó le llamó la atención la pobreza de
la vajilla con la que le sirvieron el café. En lugar de una azuca-
rera, sólo disponían de una taza.
—¿Qué pasa, Fernando, no tienen plata para comprar una
azucarera?
—¿Quiere que le confiese algo? No tenemos partida para
comprar un juego nuevo de tazas de café—,
dijo Alfonsín.
