En primer lugar, mi agradecimiento al
ingeniero Ricardo Prieto,
director del museo que lleva su nombre y apasionado coleccionista
quien, durante una visita que le hiciera hace ya varios años, me mostró
documentación y proporcionó información sobre un tema que
despertaría en mi una atracción tan grande como para dedicarle casi
un lustro a su investigación.
Mi agradecimiento también a una generosa mujer,
Nelly Estrella de
Carmona Ríos,
hija del ex gobernador Juan Estrella y viuda del doctor
Indalecio Carmona Ríos, quien fuera destacado hombre público y
dirigente socialista, quién me proporcionó documentación escrita y
gráfica de gran valor histórico.
Debo mencionar también a las decenas de personas que
colaboraron con sus testimonios, documentación y fotografías a lo
largo de estos años.
Finalmente, como ocurre en toda obra, es fundamental el trabajo de
un equipo que en este caso ha sido de gran ayuda. Quiero destacar a:
Ricardo Bustos,
que con infinita paciencia reconstruyó antiguos
documentos escritos a mano, cuyos textos introdujo en la computadora.
Dos periodistas: mi hijo,
Juan Carlos Bataller Plana y Claudia De
Arriba,
que concretaron contactos con descendientes de algunos de
los protagonistas de esta historia, con el fin de obtener información.
Nelio Espínola
y el equipo de armado digital de El Nuevo Diario,
que colaboró en la edición de páginas.
El equipo de impresión de
Cewalt S.A.
, que tuvo a su cargo la
impresión de los fascículos.
Dos personas muy importantes en el apoyo logístico para que la idea
se concretara:
Mariano Bataller y Rolando Caldentey.
Finalmente, mi más afectuosa gratitud para dos personas claves en
el proyecto:
Miguel Camporro,
autor de las ilustraciones, diagramación
y coordinación del armado y
Silvia Plana
, que corrigiera los originales
y colaborara con Camporro en la búsqueda y selección fotográfica
del trabajo.
A todos, muchas gracias.
Juan Carlos Bataller
Agradecimientos