Viernes 11 de diciembre de 2015
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L
a foto de Sergio
Uñac recibiendo los
atributos del mando
de manos de José Luis
Gioja no importa solamente
la eternización del mo-
mento a través de una foto,
tiene varios significados.
Como primera medida, el
aplauso cerrado para José
Luis Gioja por parte de los
asistentes en una sala col-
mada, tiene su valor. No es
ni más ni menos que el re-
conocimiento a la gestión
de un gobernador. Como
segundo punto, la emoción
y el dejar de lado algunos
protocolos por parte de
Sergio Uñac también tiene
su lectura particular. Recibir
los atributos, quebrarse de
una manera pocas veces
vista y levantar la vista al
cielo para confundirse con
una mirada cómplice con
Joaquín, su padre, eviden-
ció que le estaba diciendo
en silencio “acá estoy, lle-
gué, ahora debo cumplir”.
Una foto histórica