Juan Carlos Bataller
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Anécdotas de la política sanjuanina
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Pronto, las calles quedaron hermosas, con su adoquinado de
madera.
Pero hubo un detalle que los técnicos no tuvieron en cuenta: el
factor climático.
Y la madera -siempre ha sido así- se hinchaba con la humedad.
A la primera lluvia de verano, el pavimento reventó.
Y pronto el agua comenzó a arrastrar los adoquines calle
abajo.
El caso es que debieron pasar veinte años antes que las calles
del centro de San Juan volvieran a tener pavimento.
Correspondió al gobernador Juan Maurín y el intendente Silvio
Baistrocchi la tarea de pavimentar 500 cuadras con hormigón
armado.
Pero en ese lapso, las calles fueron un desastre.
Y mientras más de un horno era alimentado con los trozos de
madera, las gestiones se sucedían sin éxito ante los gobiernos
nacionales en busca de financiamiento.
En 1913 vino a la provincia el ministro de Obras Públicas de
la Nación, Carlos Meyer Pellegrini, para inaugurar la recons-
trucción del dique Nivelador. Lógicamente, las autoridades de
la época aprovecharon la oportunidad para reiterar el pechazo.
Y el ministro lanzó una frase que ofendió mucho a los sanjua-
ninos:
—Ponerle adoquines a estas calles es como calzar a paisa-
nos con zapatos de charol,
Tanta fue la ofensa que el ministro tuvo que aclarar que no
había querido decir
“paisano”
sino
“criollo”
y agregó dema-
gógicamente una frase para “el paisanaje”
—Dejen las calles así, para que se rompan los autos de los
ricos.
Con lo que no quedó bien ni con unos ni con los otros.
el escondite
de don justo
L
a anécdota que vamos a contar ocurrió en los años 20.
Los Videla Balaguer eran una familia muy católica que
vivía donde hoy está el Colegio San Francisco, en la calle
Sarmiento.
Precisamente los terrenos donde hoy se levantan el colegio y
la iglesia fueron donados por esta familia.
Justo Pastor Zavalla, que fuera diputado nacional, era casado
con una señora Videla Balaguer.
Dicen que a Pastor Zavalla lo andaba buscando la policía de
Cantoni y que el objetivo era matarlo.
El caso es que una noche cayó la policía por la casa de la calle
Sarmiento.