QUE HICISTE CON TU VIDA - TOMO III
28 Juan Carlos Bataller N o es fácil penetrar la coraza de Roberto Basualdo. Su discurso es conciso, breve y absolutamente inmodifi- cable. Se mueve con la soltura de un mercader vene- ciano y la precisión del corredor de automóviles que alguna vez fue. Sabe dónde está parado. Y es en vano pedirle que apueste a un fu- turo personal distinto. Seguramente sería fácil sacarlo de sus casillas, contradecirlo, ha- cerlo enojar. Pero el cronista, ducho en cien batallas, se pregunta si eso tendría sentido. Roberto es Roberto. Y está contento de serlo. No es para menos. Ha sido exitoso en todo lo que ha encarado y no quiere más. JCB
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